Diabetes y las fresas

Los diabéticos  a menudo se confunden acerca de qué tipo de alimentos  pueden y no pueden comer para mantener sus niveles de azúcar en la sangre estable. El dulce sabor de las fresas podría llevar a los diabéticos a comer en cantidades limitadas. Afortunadamente las deliciosas y nutritivas fresas pueden ser una parte deliciosa de una dieta para diabéticos e incluso pueden ayudar a controlar los niveles de glucosa en la sangre.

Diabetes

Este trastorno metabólico ocurre cuando el cuerpo no produce suficiente insulina o deja de ser capaces de utilizar la insulina existente. Cuando la producción y el uso de insulina son limitados, los niveles de glucosa en la sangre se elevan demasiado y causan complicaciones tanto a corto como a largo plazo. Hay unos cuantos tipos diferentes de diabetes, pero la diabetes tipo 2 es la más común. Para algunas personas que sufren diabetes, la dieta puede afectar significativamente los niveles de glucosa en la sangre. El control de la ingesta de hidratos de carbono es una forma en que los diabéticos pueden mantener los niveles de glucosa en sangre constante y prevenir complicaciones.

Fresas

Las fresas son alimentos bajos en calorías y bajos en grasa que proporciona gran cantidad de nutrientes y antioxidantes. Una taza de fresas enteras contiene aproximadamente 11 g de hidratos de carbono, 1 g de proteína y menos de 1 g de grasa. Una sola taza de fresas contiene 46 calorías. Las fresas son ricas en vitamina C, ácido fólico y manganeso. Ellos también contienen alrededor de 3 g de fibra por taza. La fibra puede ayudar a reducir los niveles de glucosa en la sangre y podría ser beneficioso en el control de la diabetes.

Cómo incluir fresas en su dieta

La mayoría de los diabéticos pueden consumir aproximadamente 45 a 60 g de hidratos de carbono en cada comida, de acuerdo con la Asociación Americana de la Diabetes. Una taza de fresas puede ser parte de una comida, y usted todavía será capaz de incluir hasta 49 g de hidratos de carbono en la misma comida. Las fresas también pueden ser parte de una merienda saludable, que son importantes para mantener los niveles de azúcar en la sangre estable entre comidas. Es importante para los diabéticos equilibrar la ingesta de hidratos de carbono con proteínas y grasas, por lo que es posible que desee comer un puñado de nueces o un trozo de queso, junto con sus fresas. Esta fruta vibrantes también se pueden utilizar en recetas para crear platos principales, ensaladas o postres. Debido a su sabor dulce, son una opción ideal para satisfacer un paladar dulce al obtener los nutrientes vitales que necesita al mismo tiempo.

Consideraciones

Además de ser una fruta sana para añadir a una dieta diabética equilibrada, las fresas en realidad podrían ayudar a prevenir o controlar la enfermedad. En abril de 2010 un estudio en el "British Journal of Nutrition" encontró que la adición de una mezcla de baya, que incluía las fresas a la dieta redujo la respuesta de glucosa en sangre a la comida. Este efecto puede ser debido a los altos niveles de compuestos polifenólicos en las bayas, lo que puede retrasar la absorción de los azúcares en el tracto digestivo.